1/6/13

MELANOMA

El melanoma es el tipo más serio de cáncer de piel. Con frecuencia el primer signo de un melanoma es un cambio de tamaño, forma, color o textura de un lunar. La mayoría de los melanomas tienen un área negra o negra azulada. El melanoma también puede aparecer como un lunar nuevo. Puede ser negro, anormal o "de aspecto desagradable."
Pensar en el "ABCDE" puede ayudarlo a recordar lo que debe vigilar:
  • Asimetría: el contorno de una mitad no es igual al otro
  • Bordes: los bordes son desiguales, borrosos o irregulares
  • Color: el color es disparejo y puede incluir tonalidades negras, cafés y canela
  • Diámetro: hay cambios en el tamaño, generalmente se vuelven más grandes.
  • Evolución: cualquier cambio en el lunar en las últimas semanas o meses
La cirugía es el primer tratamiento para todos los diferentes estadios del melanoma. Otros tratamientos incluyen quimioterapia y radiación, terapia biológica y localizada. La terapia biológica aumenta la propia capacidad del cuerpo para combatir el cáncer. La terapia localizada usa sustancias que atacan células cancerígenas sin dañar células sanas.
PATOLOGIA:
La piel es el órgano de mayor tamaño del cuerpo. Protege el cuerpo de la temperatura, la luz solar, las heridas y las infecciones. La piel tiene tres capas principales: la epidermis (capa superior o externa), la dermis (capa inferior o interna) y la hipodermis (capa que contiene los adipocitos)
Hay tres tipos de cáncer de piel:
  • Melanoma.
  • Carcinoma de células basales: Tipo de cáncer de la piel que se origina en las células basales. Estas son células pequeñas y redondas ubicadas en la parte más baja (o base) de la epidermis, que es la capa más externa de la piel.
  • Carcinoma de células escamosas: cáncer que empieza en las células escamosas, que son células delgadas y planas que se parecen a las escamas de los peces. Las células escamosas se encuentran en el tejido que forma la superficie de la piel, el recubrimiento de los órganos huecos del cuerpo, como los conductos de los aparatos respiratorio y digestivo. También se llama carcinoma epidermoide
El melanoma es más agresivo que el cáncer de piel de células basales o el cáncer de piel de células escamosas.
DETECCION:
Esta enfermedad representa el 75% de todas las muertes por cáncer de piel.
Para saber cuándo la apariencia es sospechosa existe una regla denominada A, B, C y D. Así, cuando un nevus es Asimétrico, tiene unos Bordes irregulares, toma una Coloración muy oscura o irregular y su Diámetro aumenta, son indicios de melanoma, por lo que se debe acudir al médico.
Se debe prestar especial atención, por ser marcadores de melanoma, a los nevus pigmentocelulares adquiridos que, a lo largo de la vida, modifican su morfología. También a los nevus atípicos o(urielosis)y congénitos, siendo los principales signos de alarma los nevus asimétricos, con bordes imprecisos, color cambiante y sangrado. Este cuadro puede darse conjuntamente.
TRATAMIENTO:
Una detección precoz permite la extirpación quirúrgica de la práctica totalidad de los melanomas.
Tras la cirugía solo los pacientes de alto riesgo necesitan inmunoterapia adicional. Si en un período de 3 a 5 años no se ha reproducido el melanoma, las posibilidades de recaída son mínimas.
CONCLUSION:
El melanoma es un cáncer de piel en el que las células de pigmentación comienzan a crecer en forma anormal. Si se detecta a tiempo, la mejor posibilidad para su cura es la cirugía.



Sarcoma de Kaposi

CAUSAS: Antes de la epidemia del SIDA, el sarcoma de Kaposi se presentaba principalmente en hombres mayores italianos y judíos, y rara vez, en mujeres de edad avanzada. Entre este grupo, los tumores se desarrollaban lentamente. En los pacientes con SIDA, el cáncer se puede desarrollar rápidamente y también puede comprometer la piel, los pulmones, el tubo digestivo y otros órganos. En personas con SIDA, el sarcoma de Kaposi es causado por una interacción entre el VIH, un sistema inmunitario debilitado y el herpes virus humano 8 (HHV-8). El sarcoma de Kaposi ha estado vinculado a la diseminación del VIH y el HHV-8 a través de la actividad sexual. Las personas que se someten a trasplantes de riñón o a otros trasplantes de órganos también están en riesgo de padecer el sarcoma de Kaposi. El sarcoma de Kaposi africano es bastante común en hombres adultos jóvenes que viven cerca del ecuador. Una forma de esta enfermedad también es común en niños pequeños africanos. SINTOMAS: Los tumores aparecen con mayor frecuencia como protuberancias de color rojo azulado o púrpura en la piel. Son de color rojo púrpura debido a que son abundantes en vasos sanguíneos. Las lesiones pueden aparecer primero en los pies o los tobillos, los muslos, los brazos, las manos, la cara o cualquier otra parte del cuerpo. Igualmente, pueden aparecer en sitios dentro del cuerpo. Otros síntomas pueden ser: Expectoración hemoptoica Dificultad para respirar PRUEBA Y EXAMENES: Se pueden llevar a cabo los siguientes exámenes para diagnosticar el sarcoma de Kaposi: Broncoscopia Tomografía computarizada Endoscopia Biopsia de pie TRATAMIENTO: La forma de tratamiento de esta afección depende de: Qué tan inhibido esté el sistema inmunitario (inmunodepresión) Cantidad y localización de los tumores Síntomas Los tratamientos abarcan: Terapia antiviral contra el VIH Combinación con quimioterapia Congelamiento (crioterapia) Radioterapia Las lesiones pueden reaparecer después del tratamiento. EXPECTATIVAS Y PRONOSTICOS: El tratamiento del sarcoma de Kaposi no mejora en sí las posibilidades de supervivencia de los pacientes con SIDA. El pronóstico depende del estado de inmunidad de la persona y de qué tanto virus del VIH tenga el paciente en su sangre (carga viral). POSIBLES COMPLICACIONES: Las complicaciones pueden abarcar: Tos (posiblemente con sangre) y dificultad para respirar si la enfermedad está en los pulmones Hinchazón de las piernas que puede doler o causar infecciones si la enfermedad está en los ganglios linfáticos de las piernas Los tumores pueden reaparecer incluso después de tratamiento. El sarcoma de Kaposi puede ser mortal para una persona con SIDA. Una forma agresiva del sarcoma de Las prácticas sexuales con precaución pueden prevenir la infección por el VIH. Esto previene el SIDA y sus complicaciones, incluyendo el sarcoma de Kaposi.Kaposi africano se puede diseminar con rapidez a los huesos. Otra forma de este sarcoma que se encuentra en niños africanos no afecta la piel; en lugar de esto, se disemina a través de los ganglios linfáticos y órganos vitales, y puede volverse rápidamente mortal. PREVENCION: Las prácticas sexuales con precaución pueden prevenir la infección por el VIH. Esto previene el SIDA y sus complicaciones, incluyendo el sarcoma de Kaposi.

Aprueban una vacuna argentina para tratar el cáncer de pulmón

RECOMBIO está trabajando con dos vacunas diferentes para el tratamiento del cáncer una es un anticuerpo monoclonal anti-idiotipo Racotumomab (1E10) y la otra es una vacuna a base del antígeno nominal NGcGM3. Una de las vacunas del proyecto de investigación de RECOMBIO se basa en un anticuerpo monoclonal de características muy particulares, designado Racotumomab (1E10). El anticuerpo Racotumomab (1E10) es reactivo al idiotipo (término que se refiere a la zona de reconocimiento de los anticuerpos) de otro anticuerpo, conocido comoP3. Este último reconoce muy especialmente ceramidos de laMonosialil Lactosa N-glicolilados. Debido a esto, el Racotumomab (1E10) se clasifica dentro de los llamados anticuerpos anti-idiotipo, ya que reconoce el idiotipo de otro anticuerpo, y semeja en su propio idiotipo al propio antígeno. La utilización de los anticuerpos anti-idiotipo es una estrategia que permite tener considerables cantidades de inmunógeno a través de la tecnología de producción de anticuerpos monoclonales. Con el Racotumomab (1E10) se han realizado varios estudios clínicos de fase I en los que se demostró su buena tolerabilidad (tabla 1). Actualmente se está llevando acabo un ambicioso plan de desarrollo en cáncer de pulmón. La medicina de vanguardia de Cuba sigue generando logros a nivel mundial. Esta semana, se registró en La Habana y en Buenos Aires una segunda vacuna contra el cáncer de pulmón, que logra aumentar la calidad de vida de los pacientes que sufren esta enfermedad. El fármaco, denominado Racotumomab, comenzará a usarse en la isla caribeña y en nuestro país, desde donde se exportará a todo el continente. Especialistas destacan su potencial beneficio. Durante la presentación de Racotumomab, se afirmó que su uso sirve para el tratamiento del cáncer de pulmón, que si bien no cura la enfermedad, según sus desarrolladores, mejora la calidad de vida de los pacientes. Su uso fue avalado por ensayos clínicos realizados en 2012, en 86 países, que muestran que el medicamento “prolonga la vida de personas con cáncer pulmonar de células no pequeñas”. El medicamento fue desarrollado por el Centro de Inmunología Molecular de La Habana. “Racotumomab conduce a una mayor apoptosis (muerte) de las células tumorales y a una menor vascularización del cáncer”, explicaron desde el centro. Los responsables de la vacuna advirtieron además que si bien no se puede afirmar que esta vacuna... represente la curación de la enfermedad, sí aumenta la esperanza y calidad de vida por la reducción del tumor. Según los investigadores, cuando el carcinoma no se extiende por un largo período, el enfermo se encuentra en una etapa estable de su dolencia y puede vivir por mucho tiempo. Racotumomab es la segunda vacuna para cáncer de pulmón desarrollada por el Centro de Inmunología Molecular después de CIMAvax EGF. La certificación para su registro por parte del Centro para el Control Estatal de la Calidad de los Medicamentos de Cuba se produjo hace una semana, por lo que se espera la pronta utilización de este producto en los policlínicos cubanos, que son todos públicos y gratuitos. De forma paralela a su registro en Cuba, Racotumomab fue presentada en la Argentina para su posterior exportación a esa nación sudamericana. El cáncer de pulmón es el segundo en incidencia en Cuba y el primero en mortalidad. Se estima que en la isla caribeña unas cinco mil personas padecen la enfermedad en estado avanzado. En la Argentina, estos tumores son los segundos más comunes entre hombres y cuartos entre mujeres, según datos del Instituto Nacional del Cáncer. Un equipo de más de 90 científicos argentinos y cubanos desarrolló un medicamento que permite tratar a las personas que padecen un estado avanzado del cáncer de pulmón. El nuevo medicamento se llama Racotumomab y en julio comenzará a ser comercializado por el laboratorio Elea, a través de las obras sociales, las prepagas o la cobertura pública. Se trata de una herramienta que no es preventiva y que viene a complementar las terapias convencionales. La vacuna fue desarrollada por un consorcio integrado por entidades públicas y empresas privadas de Argentina: Unqui, Universidad de Buenos Aires, investigadores del laboratorio de Inmunogenética del Hospital de Clínicas perteneciente al Conicet, Instituto de Oncología Angel Roffo, Hospital de Niños Juan Garrahan, Laboratorio Elea y el Grupo Insud, fundador del consorcio público-privado. Asimismo, participó el Centro de Inmunología Molecular de La Habana (CIM), en Cuba. El descubrimiento consistió en la identificación de antígenos (sustancias capaces de generar una respuesta inmune) que "sólo están presentes en las células tumorales y son biológicamente relevantes en la progresión de un cáncer metastásico", según explicó Daniel Alonso, director del Laboratorio de Oncología Molecular de la Universidad de Quilmes, investigador del Conicet y director científico del consorcio. El desarrollo tuvo el apoyo de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, que depende del Ministerio de Ciencia y Tecnología, y del Instituto Nacional del Cáncer. Roberto Gómez, director médico del laboratorio Elea, aseguró que “se intenta con este producto que el tumor deje de crecer o crezca muy lentamente”. Según la indicación aprobada por la autoridad regulatoria Argentina, Anmat, es una especialidad medicinal autorizada bajo condiciones especiales N° 57.031; la aplicación es ambulatoria, las primeras cinco dosis de inducción se aplican cada 14 días y luego hay un refuerzo de mantenimiento cada 28 días. En Argentina, unas 9 mil personas mueren al año por cáncer de pulmón, lo que representa una mortalidad del 86 por ciento de los afectados, según datos del Instituto Nacional del Cáncer. El medicamento fue aprobado por la Anmat y estará disponible en julio. El nuevo medicamento se llama Racotumomab y en julio comenzará a ser comercializado por el laboratorio Elea, a través de las obras sociales, las prepagas o la cobertura pública. Se trata de una herramienta que no es preventiva y que viene a complementar las terapias convencionales.

Primera vacuna terapéutica contra el cáncer de pulmón

Según datos del Instituto Nacional del Cáncer, en el país los tumores de pulmón ocupan el cuarto lugar por su incidencia (detrás de los de mama, de próstata y de colon), pero son los que más muertes causan, con alrededor de 9000 anuales. Casi tres cuartas partes de las consultas corresponden a tumores llamados "de células no pequeñas". En los casos avanzados (que son la mayoría, porque es un tipo de cáncer que no se detecta precozmente), las únicas herramientas terapéuticas con que contaban los oncólogos eran la radioterapia y la quimioterapia. Pero tras más de 18 años de investigaciones, un consorcio público-privado que impulsó en el país el laboratorio Elea acaba de presentar el primer medicamento innovador que se da a conocer para esta patología en la última década: una vacuna terapéutica. No previene el tumor, pero promueve su destrucción por el sistema inmune del propio organismo. " Después de 18 años de desarrollo, llegamos a la mayoría de edad -bromea el doctor Daniel Alonso, director del Laboratorio de Oncología Molecular de la Universidad de Quilmes, investigador del Conicet y director científico del Consorcio de Investigación ID+i-. Hoy estamos en condiciones de ofrecer un nuevo recurso para un grupo de pacientes para los que no había muchas alternativas." En ensayos clínicos controlados a doble ciego (ni el médico ni el paciente sabían qué se les estaba administrando), el fármaco, cuyo nombre científico es racotumomab , triplicó el porcentaje de pacientes que viven dos años después de la aplicación de la vacuna, de 8 a 24%. Los "buenos respondedores" pueden prolongar bastante más su sobrevida. "El cáncer de pulmón es una de las enfermedades más mortales que vemos -explica el doctor Luis Fein, director de investigación del Instituto de Oncología de Rosario, investigador del ensayo clínico de la vacuna y presidente del Grupo Argentino de Investigación Clínica en Oncología-. En etapa avanzada, sólo teníamos un tratamiento paliativo. En el estadio IV, una vez que la enfermedad se diseminó, la sobrevida promedio era de entre seis y ocho meses. Eso se puede mejorar con la quimio y la radioterapia, que siguen siendo la indicación básica para estos pacientes. La vacuna no suplanta esta estrategia, pero ofrece una nueva opción para que la mejoría se prolongue." El racotumomab se desarrolló a partir de una colaboración con el Instituto de Inmunología Molecular de La Habana, Cuba. Allí y aquí, más de 90 científicos pertenecientes a la Universidad de Quilmes, el Instituto Roffo, el hospital Garrahan, el Conicet y la Universidad de Buenos Aires trabajaron en la identificación de un antígeno (una sustancia que promueve la formación de anticuerpos, porque el sistema inmune la reconoce como una amenaza) que sólo expresan las células tumorales, pero no las sanas, y en el desarrollo de un anticuerpo monoclonal que, al inducir al cuerpo a reaccionar contra ese antígeno, ataca al tumor y sus metástasis, pero no al tejido normal. "Esto es importantísimo porque estos antígenos se encuentran en la superficie de las células tumorales y por lo tanto son accesibles al sistema inmune -subraya Alonso-. Y como están ausentes de los tejidos normales, nos permite focalizar la acción terapéutica." "Si comparamos la quimio o la radioterapia con la vacuna -ilustra el doctor Roberto Gómez, director médico de Elea-, se podría decir que las primeras son como una bomba, y con la última uno apunta con mira telescópica, dirige la acción al blanco específico." Por esta selectividad, la inmunización carece de efectos adversos relevantes, más allá de molestias ocasionales en el sitio de la inyección o, eventualmente, un cuadro de tipo gripal que desaparece espontáneamente. Según explica Alonso, la parte más reactiva del antígeno tiene que ver con un componente azucarado. "Al parecer, los tumores, a través de mecanismos de captura, toman estos componentes de la dieta, particularmente de las carnes y leches de origen bovino, y sobreexpresan estos elementos que favorecen su velocidad metastásica -destaca-. Esto es muy bueno porque el blanco no sólo cumple una función en la biología del tumor, sino que es específico de las células cancerosas." La vacuna está indicada para casos avanzados, que hayan recibido quimio o radioterapia y que estén estables, porque si la enfermedad avanza muy rápido no hay tiempo para que el sistema inmune monte una respuesta eficiente. "Se comienza con un período de inducción, durante el cual se administran cinco dosis de la inyección intradérmica, una cada catorce días, para estimular inicialmente la inmunidad -detalla Gómez-. Y luego se continúa con un período de mantenimiento de un refuerzo mensual. La idea es estimular continuamente el sistema inmune, que es deprimido por el propio tumor." La nueva medicación será cubierta por las obras sociales y prepagas para las indicaciones aprobadas por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica, y estará disponible desde julio. Para la directora del Consorcio ID+i, doctora Silvia Gold, se trata de "un medicamento absolutamente innovador, una nueva clase terapéutica. Hoy ofrece una alternativa a pacientes con cáncer de pulmón, pero también tiene un potencial que deberá estudiarse en otros tumores que presentan este mismo blanco". "Se trata de un excelente ejemplo de colaboración entre los sectores público y privado, de culminación de la investigación básica, preclínica y clínica -opina el inmunólogo Gabriel Rabinovich, que no participó de la investigación-. También es destacable la decisión de una empresa farmacéutica de apostar a un proyecto de investigacion aún en etapas germinales. Ojalá existan muchas más que se animen a este tipo de inversiones y a la asociación con científicos de diferentes áreas". "Por supuesto, no es una cura milagrosa -aclara Alonso-, sino una nueva opción terapéutica que se incorpora al arsenal contra una enfermedad muy compleja, como es el cáncer pulmonar avanzado." Proyectos en marcha Estudian otras dos estrategias prometedoras Sarcoma de Kaposi Gabriel Rabinovich descubrió que la proteína Galectina-1 tiene un papel protagónico en el crecimiento de los tumores y en la formación de metástasis. Junto con su grupo del Instituto de Biología y Medicina Experimental del Conicet desarrolló un anticuerpo monoclonal que la bloquea en un modelo animal. Resultados preliminares en sarcoma de Kaposi, un cáncer de piel muy agresivo, muestran que el anticuerpo suprime su crecimiento e inhibe el de los vasos sanguíneos en un 85% de los casos. Ya fue motivo de una patente compartida con el Instituto Dana Farber, de Harvard Melanoma Después de 25 años de investigación, el doctor José Mordoh, financiado por el Conicet, la Fundación Sales y la Fundación Cáncer, inició la fase final de un estudio clínico en 108 pacientes, autorizado por la Anmat, para aprobar una vacuna terapéutica contra el melanoma cutáneo. El Conicet y la Fundación Sales firmaron un convenio con el Laboratorio Pablo Cassará que, en caso de aprobarse, producirá la vacuna para la Argentina, América latina y Australia

Rituximab-Mabtera

El rituximab es un anticuerpo monoclonal quimérico murino y humano, obtenido por ingeniería genética. Es una inmunoglobulina (Ig) glucosilada constituida por las regiones constantes de las Ig de clase G y subclase 1 (IgG1) humanas y las secuencias de la región variable de las cadenas ligeras y pesadas murinas. Este anticuerpo se produce a partir de un cultivo en suspensión de células de mamífero (células de ovario de hámster chino) y se purifica mediante cromatografía de afinidad y de intercambio iónico, y procedimientos específicos de inactivación y de eliminación de virus.1 El rituximab se une específicamente al antígeno CD20, una fosfoproteína transmembranaria no glucosilada que se expresa en los linfocitos pre-B y B maduros. Este antígeno se expresa en más del 95 % de los linfomas no-Hodgkins (LNH) de linfocitos B. El antígeno CD20 se expresa tanto en linfocitos B normales como en células tumorales, pero no en las células madre hematopoyéticas, células pro-B y las células plasmáticas normales ni en otros tejidos normales. Este antígeno no se internaliza tras la unión del anticuerpo ni se elimina de la superficie celular. El antígeno CD20 no se halla en la sangre como antígeno libre, y, por esta razón, no compite por la unión con los anticuerpos.2 El dominio Fab del rituximab se une al antígeno CD20 en la superficie de los linfocitos B, mientras que el dominio Fc puede reclutar efectores de la respuesta inmune para mediar la lisis de los linfocitos B. Los mecanismos posibles de la lisis celular mediada por efector incluyen citotoxicidad dependiente del complemento- (CDC) como resultado de la unión de C1q, y la citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (ADCC) mediada por uno o más receptores Fc de la superficie de los granulocitos, macrófagos y células NK (natural killer). También se ha demostrado que la unión del rituximab al antígeno CD20 de los linfocitos B induce la muerte celular por apoptosis. Tras completarse la administración de la primera dosis de rituximab, el número de linfocitos B periféricas disminuyeron por debajo de lo normal. En los pacientes tratados de neoplasias hematológicas, la repoblación de linfocitos B comenzó a los 6 meses de tratamiento y se recuperaron los niveles normales entre los 9 y los 12 meses después de finalizado el tratamiento. En pacientes con artritis reumatoide o lupus eritematoso sistémico se observa una disminución inmediata del número de linfocitos B en sangre periférica después de las dos perfusiones de 1.000 mg de rituximab separadas por un intervalo de 14 días. El número de linfocitos B en sangre periférica empieza a aumentar desde la semana 24 y la evidencia de repoblación se observa, en la mayoría de los pacientes, en la semana 40, independientemente de que Rituximab se administre en monoterapia o en combinación con metotrexato. El rituximab es un anticuerpo monoclonal, un tipo de proteína, que se une a la superficie de un tipo de glóbulos blancos, los linfocitos B. Cuando el rituximab se une a la superficie de estas células, causa su muerte. Eficacia El rituximab está indicado para el tratamiento de dos enfermedades: a) linfoma no-Hodgkin tanto indolente como agresivo Los linfomas no hodgkinianos son enfermedades del sistema linfático en las que están implicados los linfocitos B. El rituximab puede utilizarse solo o en asociación con otros fármacos. El rituximab puede administrarse en tratamiento continuo (de mantenimiento) durante 2 años a pacientes que hayan respondido al tratamiento. b) artritis reumatoide La artritis reumatoide es una enfermedad de las articulaciones en la que están implicados los linfocitos B, causando algunos de los síntomas que puede padecer. El rituximab se utiliza en el tratamiento de la artritis reumatoide en personas que ya hayan sido tratadas con otros medicamentos, que bien han dejado de funcionar o no han funcionado lo suficientemente bien. En esta indicación, el rituximab se administra generalmente en asociación con metotrexato.